¿Cuándo vale tu empresa?

¿Cuándo vale tu empresa?

¿Cuándo vale tu empresa? Existen muchos criterios para valorar empresas. Mi experiencia en comprar y en vender empresas me ha llevado a sintetizar seis elementos:

1.- FACTURACIÓN: Sobre todo la evolución pasada y futura de la facturación. Se basa en el potencial de crecimiento de las ventas.

2.- EBITDA: Muestra el valor añadido y la generación de caja. Es el principal criterio de valoración de los expertos que, a partir de aquí, hacen “discounted free cash-flow” y cálculos similares.

3.- ENDEUDAMIENTO: No es lo mismo comprar una empresa con un ratio de endeudamiento del 65% o del 0%. En el primer caso, será necesario reducir la deuda. En otro caso, se podrá financiar más fácilmente.

4.- TECNOLOGÍA: Toda empresa sabe hacer algo muy bien. O en el mejor de los casos dispondrá de una tecnología propia apreciada por el posible comprador.

5.- CLIENTES: En muchos casos, el comprador está interesado en la cartera de clientes, sobre todo si es un competidor mayor.

6.- EQUIPO: En mi opinión, el equipo directivo es el gran olvidado por los vendedores en las pymes pequeñas. Una empresa no comprará otra si todo pasa por el empresario que debe decidirlo todo. Sólo si existe un equipo directivo, que dé un muy buen apoyo, una empresa podrá venderse con un valor razonable.

Realizar un Plan estratégico para aumentar el valor de la empresa

Este último punto 6 es el que más trabajamos en implementar un Plan estratégico con el que conseguirás, en este orden:

  • Construirás un equipo directivo potente que haga de motor del cambio.
  • Innovará en tecnología para crear más valor.
  • Crecerá el valor de la cartera de clientes.
  • Mejorará notablemente el EBITDA. 📈
  • Se reducirá el endeudamiento.
  • Aumentará el valor de la empresa. 💲

Por tanto, todo pasa por construir, en primer lugar, un gran equipo directivo, haciendo un buen Plan Estratégico participativo.

¿Cuándo vale tu empresa?

No debes esperar a que vengan a comprarte para intentar subir el valor en el último momento.

Es necesario trabajarlo con tiempo. Y sobre todo con un equipo directivo comprometido.

Si quieres, puedo acompañarte en este proceso. ¿Te animas? 😉

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