Las 3 claves para reducir tu estrés de empresario

Las 3 claves para reducir tu estrés de empresario. Si eres un director de una pyme industrial, angustiado por el día a día, sigue leyendo. En este artículo explico las tres creencias que te llevan al estrés y las 3 claves que te ayudarán a superarlo. Incluso te permitirán irte de vacaciones tranquilo este verano.

Las 3 creencias que generan estrés

La lista de causas de tu malestar como empresario puede ser muy larga. Pero la resumiré sólo en tres conceptos:

Como empresario/a «tengo que poder con todo»

Esto demuestra tu compromiso total con tu empresa, pero tal como te dices esta frase a ti mismo, siempre te provocará estrés. Significa que sólo tú tienes todas las soluciones y te obligas a que sean acertadas. Además, puede ser que no confíes en que tus directivos de segundo nivel te puedan aportar soluciones realmente interesantes, simplemente porque tú conoces tu negocio mejor que nadie. O sea, que te cargas con todas las mochilas y después no te queda aire para respirar.
No «controlas» las epidemias, las guerras ni las crisis

Te gustaría que todo esto no pasara, pero pasa. La pérdida de control sobre el entorno es una de las causas más reconocidas del estrés. Revelarte acerca de sucesos que no están bajo tu control y no aceptarlos no lleva a ninguna parte. Sólo a la frustración por cada nuevo incidente de materias primas, transporte, inflación etc.
Hay «demasiadas cosas a hacer»

Tienes unas largas listas de cosas por hacer y sólo te da tiempo de hacer las de corto plazo, apagando fuegos cada día. Aquello importante que te propones, va saltando de un día a otro, de una semana a otra y de un mes a otro. Nunca tienes tiempo de hacer lo importante hasta que se convierte en tan urgente que ya no tienes más remedio que hacerlo.

Una de las definiciones de estrés es:

«Estar haciendo algo, mientras tu cabeza te dice que tendrías que estar haciendo otra cosa.»

En realidad, estar haciendo algo secundario del día a día, en lugar que estar ejecutando las prioridades estratégicas.

Las 3 claves para reducir el estrés

Nuevamente podría hacer una larga lista, pero me gusta resumir en tres conceptos sencillos:

1.- Crea un equipo directivo potente

Si tu empresa industrial tiene entre 10 y 50 empleados, ya deberías haber creado un pequeño equipo directivo compuesto, como mínimo, por estos directivos:

Director Comercial
Dir. de Operaciones (adaptar el nombre).
Director Financiero
Otros directivos que se consideren imprescindibles.

Si la empresa tiene entre 50 y 250 empleados, seguro que ya tienes este equipo directivo, que cómo máximo tiene que ser de 8 miembros, ya que más se vuelve ineficiente. Aunque puede pasar que este equipo directivo no esté bien coordinado entre sí, no tome las decisiones que les corresponde y te saque de quicio en más en una ocasión.

¿Para qué sirve un equipo directivo potente?

Para delegar en confianza que tomarán buenas decisiones.

Hemos quedado al principio que uno de los motivos del estrés es que, como empresario, «tengo que poder con todo». Es verdad que al final, las decisiones importantes las seguirás teniendo tú, pero por el camino habrás aprendido a escuchar, a confiar en las opiniones de tus directivos, a hacer que te preparen los datos objetivos para tomar decisiones.

Y lo más importante. Los directivos ya tomarán las decisiones correctas en sus ámbitos de actuación descargándote de una amplia carga de trabajo del día a día.

2.- Define unos objetivos claros y una estrategia flexible

Veo muchas empresas que no consiguen definir unos objetivos claros ni una estrategia para conseguirlos. Trabajan a muy corto plazo sin levantar la vista en el medio o largo plazo de hacia dónde quieren ir.

No saber a dónde vas, genera mucho estrés.

Por eso recomiendo que el empresario, juntamente con su equipo directivo de confianza, marquen las metas y las estrategias de los próximos tres años.

Evidentemente que seguirá habiendo sobresaltos en forma de crisis súbitas sanitarias, económicas, energéticas, sociales, etc. No trates de «controlar» lo que no se puede controlar porque no está en tu ámbito de influencia. Es más saludable mentalmente aceptarlo. La palabra «aceptación» es la clave.

Todo el equipo directivo tiene que aprender a flexibilizar la ejecución del plan que se habían trazado. Y el sistema de gestión tiene que permitir esta flexibilidad. Esta capacidad de adaptación colectiva a los vaivenes de la economía reducirá el estrés del empresario. Se sentirá arropado por su equipo y juntos, encontrarán nuevas soluciones a los nuevos retos planteados.

3.- Haz una buena ejecución de las prioridades

Decía anteriormente que «haz demasiadas cosas a hacer», lo cual genera estrés. Te planteo tres preguntas:

¿Habéis definido unas pocas prioridades para este trimestre?
¿Qué indicadores os marcáis para saber que los estáis consiguiendo?
¿Estén bien definidos los responsables y los plazos?

Todo no se puede hacer. Pero por lo menos que se ejecuten bien los objetivos prioritarios.

Cuando el empresario constata que trimestre a trimestre se consiguen los objetivos prioritarios, su nivel de angustia se reduce notablemente.

Siente que vuelves a retomar el control sobre tu empresa, arropado por tu equipo directivo, que toma decisiones correctas de manera autónoma.

La solución: Implementa un plan estratégico en tu pyme industrial

Yo mismo, dirigiendo pymes industriales durante 25 años, he estado en esta situación de estrés en varias ocasiones. Y desde que implementamos en equipo nuestro primer plan estratégico, en el año 2.000, mi nivel de estrés por el día a día se vio sustituido por la diversión de gestionar un equipo directivo muy comprometido.

¿Cuáles son las claves para implementar un plan estratégico con éxito?:

Formalizar el equipo directivo.
Definir la estrategia en equipo, con el liderazgo del empresario, de manera participativa.
Implementar la organización, los indicadores y los nuevos métodos de gestión eficaz de una pyme industrial.
Hacer este proceso de manera práctica, fácil, flexible, con el mínimo de esfuerzo y tiempo de implementación.