Te diré la verdad: si no confías, tienes un problema
Pero ésta es la buena noticia:
La confianza genera excelencia y es fácil conseguirla.
Permíteme llevarte a mi primer día de trabajo en el mundo empresarial, quizás te ayude.
Un día, mi jefe soltó esa bomba:
“Harás todo el plan de estudios de Nissan Motor Ibérica”.
Y yo contesté: “No sé por dónde empezar”.
Su respuesta: “No te preocupes. CONFÍO EN TI”
Cada semana, me muestras un borrador de tus ideas, las comentamos y lo iremos mejorando juntos paso a paso. Ya verás cómo sale BIEN”.
El primer borrador todavía me da vergüenza.
PERO MI JEFE:
En lugar de criticar la baja calidad del documento → se centró en escuchar mis ideas y discutirlas constructivamente.
En lugar de ponerse en modo “superior” → escuchó con curiosidad.
Al final, tuvo razón.
Diseñamos el plan de estudios para más de 5.000 trabajadores en España.
Lo conseguímos.
Y ésta es la gran moralidad:
La confianza desencadena lo mejor.
Cuando decides confiar desde el principio, inspiras lo mejor en los demás.
Cuando decides desconfiar, llevas a controles excesivos, alimentando miedo y errores.
No hay promedio.
A) Confiar: promueve el potencial interno con formación activa y acompañamiento.
B) Desconfiar: incluye mecanismos de control, sembrando desconfianza.
Ambas opciones definen la dinámica de tu equipo.
¿Cuál es tu elección?
Si quieres hablar tienes mis datos en contacto o con una videollamada.
Y podrás resolver el primer punto: Te diré la verdad: si no confías, tienes un problema.